Soul Reaver

La abadía inundada

Consejo del dios antiguo…

Dios antiguo: Tu hermano Rahab se ha recluido con su linaje en las ruinas de una abadía semiderruida, al norte de la tumba de los Sárafan.

Consejo de Ariel…

Ariel: Una abadía profanada, languidece medio inundada al norte de la tumba Sárafan.

Raziel se abre paso hasta la entrada a la abadía inundada…

Dios antiguo: Esta abadía, en su dia un santuario contra la amenaza vampírica, acabó inundada por el diluvio que atormentó estas tierras.

Tu hermano Rahab y su estirpe, víctimas de los débiles rayos del sol de Nosgoth, superaron su intolerancia al agua y se retiraron a las profundidades. Ahora acechan en estas ruinas deslizándose entre la oscuridad de las aguas estancadas.

Raziel entra en la sala donde se halla Rahab…

Rahab: Raziel.

Raziel: ¡Rahab! Para ser tan inadaptado, te has adaptado muy bien a tu entorno.

Rahab: No te burles de mi Raziel. Tú, más que nadie deberías respetar el poder que confiere la superación de las limitaciones. Kain dijo que vendrías.

Raziel: ¿Te hablas con el asesino?

Rahab: Deberías controlar tu lengua blasfema.

Raziel: ¿Y qué más te dijo?

Rahab: Que me destruirías.

Rahab: De hecho lo haré. Pero dime, antes de que expulse a tu alma de su morada ¿Sabes lo que éramos antes de que Kain nos engendrara?

Rahab: Humanos.

Raziel: Sárafan, Rahab. La antítesis de lo que siempre creimos ser.

Rahab: ¿Eso importa? Estábamos perdidos. Él nos salvó.

Raziel: ¿Nos salvó, de qué?

Rahab: De nosotros mismos.

Si Raziel regresa tras ser derrotado…

Rahab: Raziel vuelve. ¿Aún crees poder superarme?

Cuando Raziel consigue destruir a Rahab…

Rahab: ¡Estoy acabado!

Tras liberar su alma, Raziel la consume

Dios antiguo: Gracias al alma de Rahab, has superado tu antigua vulnerabilidad al contacto con el agua. La inmersión en el agua no disolverá tu cuerpo físico permitiéndote nadar hacia zonas que antes te estaban vedadas.

Al abandonar la estancia de Rahab…

Dios antiguo: Más allá del remolino del abismo, un túnel subterraneo conduce hacia el Norte, a los territorios de Dumah y Turel. Con el alma de Rahab puedes nadar para acceder al lugar que antes tenías vedado.