Blood Omen

El retiro de Nupraptor

Kain ve una señal con el nombre de Nachtholm

Kain (vo): La aldea de Nachtholm era la típica de la clase campesina de Nosgoth. Entre granjeros y herreros de la pacífica vida campestre abundaban los bandidos y los bandoleros.

Kain observa un letrero con el nombre de Steinchencröe

Kain (vo): El pueblo de Steinchencröe apestaba con el infame aroma de sus habitantes. En vida, no habría honrado el lugar con mi presencia. En la muerte, simplemente me uní al hedor.

Dentro de la ciudad, Kain encuentra a un hombre removiendo un caldero verde…

Kain (vo): Este lunático se alegró al verme. Quizá su locura revelase una verdad aún mayor…

Irmok el loco: Los bastardos de Steinchencröe me rehuyen como Nosgoth los rehuye a ellos. Sé lo que es ser diferente, vampiro, no te tengo miedo. Pero recuerda esto: habrá otros que te hablarán si sabes escuchar.

Saliendo de Steinchencröe, Kain llega a un campamento zíngaro…

Kain (vo): Los zíngaros, portadores del engaño y la superstición. Mucha de su verborrea ha de ser tomada con escepticismo puesto que con frecuencia juegan con las cansadas mentes de los viajeros. Sin embargo, unos cuantos sí que tienen algo interesante que decir.

Dejando atrás el campamento, Kain llega a una señal con el nombre de Vasserbünde

Kain (vo): La aldea de Vasserbünde. Su gloria estaba ahora estancada y apagada. Como un niño confiado cerca del oscuro retiro de Nupraptor.

Dentro de la ciudad, observa por primera vez la guarida de Nupraptor en la lejanía…

Kain (vo): El retiro de Nupraptor yacía al oeste de Vasserbünde. Arrancaría de raíz el cáncer de su corazón.

Saliendo de la ciudad por un puente…

Kain (vo): El viento portaba alaridos desde el oeste. No pude más que sonreir: Alguien en este mundo estaba sufriendo más que yo.

Viendo de cerca el retiro de Nupraptor…

Kain (vo): Las impresionantes fauces de la guarida de Nupraptor arrojaban sobre Nosgoth todo su dolor y miseria. La enfermedad clamaba ser erradicada.

Atravesando una cueva que lleva al refugio de Nupraptor…

Kain (vo): El mentalista Nupraptor era conocido en Nosgoth por sus trucos mentales, telepáticos y telequinéticos. Los peregrinos venían de todas partes buscando el alivio de sus mentiras. Yo no buscaba su sabiduría, sino su vida.

Una vez dentro del refugio, Nupraptor advierte la presencia de Kain…

Nupraptor: ¿Te atreves a adentrarte en mi santuario? ¿No puedo guardar luto en paz? ¡Vete! Vete y déjame en completa soledad.

Dentro de la fortaleza, Kain encuentra encadenada a una de las sirvientas de Nupraptor…

Kain (vo): Encontré a una de las criadas de Nupraptor, desquiciada y asustada, balbuceando palabras entrecortadas a través de su ensangrentada y rota dentadura. Aunque estuve tentado por la sed, le tendí mi mano permitiéndole que contara su historia…

Ella habló de su señor Nupraptor, llevado a la locura por el brutal asesinato de su querida Ariel. Habló de su automutilación, cuando se cosió los ojos y los labios para renegar del mundo exterior. Alimentado por la desilusión y la desesperación, volvió su magia contra el Círculo, afectando a sus mentes con su locura.

Nupraptor ya no se preocupa por nada ahora, salvo por su patética autocompasión. Cicatrices como las suyas nunca curarían. La muerte no sería sino misericordia.

Kain llega a otra habitación como tantas otras llenas de cadáveres…

Kain (vo): El muy cretino desperdiciaba la vida y la dejaba derramarse por los suelos. Tal derroche era un disparate. Quizá Nupraptor necesitase recibir una lección sobre el valor de la sangre.

En otra sala, Kain ve a través de las cristaleras situadas en los orificios oculares de la calavera…

Kain (vo): A través de las cuencas de los ojos del retiro vi Nosgoth de diferente forma: el cristal parecía curvar la imagen y alterar el color. Como si Nosgoth necesitase ayuda para hacer aparente su corrupción.

Kain consigue llegar hasta la estancia de Nupraptor, que se halla acompañado por Malek…

Nupraptor: Así pues Malek, ¿una vez más has vuelto a fallar al Círculo? ¡Vete, paladín! No necesito tu protección. Acércate, Kain, ven. Comparte mi dolor…

Kain (vo): Así que este era el mentalista Nupraptor, este acabado y patético hombrecillo. A pesar de sus lesiones, no se rendiría sin pelear.

Kain: ¡Muy bien, viejo estúpido! Si es la muerte lo que buscas, no te la negaré.

Tras matar a Nupraptor degollándolo…

Kain (vo): Quizá la cabeza de su amado convencerá a Ariel de que he llevado a cabo mi tarea.