La última transgresión
Raziel se cruza de nuevo con el dios antiguo en su viaje a la fortaleza Sárafan…
Dios antiguo: Me has fallado, Raziel.
Raziel: Me pregunto, anciano, ¿realmente me resucitaste o simplemente estabas allí cuando desperté de mi tormento en el abismo?
Sospecho que meramente me viste conveniente. Soltado en tu guarida por Kain. Indestructible por alguna razón. Una herramienta duradera y crédula a la que manipular. Eso es algo que tengo que admitir: he sido utilizado por otros una y otra vez pero siempre acabé apartándome de su camino.
¿Qué es lo que tengo, demonio, que me convierte en un instrumento tan poco fidedigno? ¿Por qué sobrevivo a una prueba tras otra soportando una interminable sucesión de humillantes muertes y resurrecciones? Parece que hay mucho sobre mi destino y mi historia que desconozco. Quizá más de lo que tú mismo sabes…
Dios antiguo: ¡Traidor!
¡Eres indigno!
Has fracasado.
La Rueda de la Vida aulla por tu alma, aunque su hambre nunca será saciada.
Cuando llega al claro de los Pilares, dos demonios salen a su paso…
Demonio negro 1: Piensa que puede cambiar su destino.
Demonio negro 2: ¡Qué tontería!