Blood Omen 2

Los barrios bajos

Umah (susurro): Kain, no tengas miedo.

Kain: ¡Vaya! ¿Qué magia es esta?

Umah (susurro): Estoy usando el susurro, Kain. Una aptitud natural de los vampiros. De esta forma podemos estar en contacto incluso a grandes distancias.

Kain: ¡Sí! Ya lo recuerdo.

Kain (vo): Ella ha estado en mi mente. Casi llegué a creer que yo la había llamado.

Umah (susurro): No te preocupes, no puedo leer tus pensamientos. Sólo puedo hablarle a tu mente y escuchar tus respuestas. Ahora baja por esa calle. Te estaré esperando.

Kain va calle abajo hasta volver a encontrarse con Umah…

Umah: Bienvenido a los barrios bajos. Nos encontramos en la parte más ruinosa de la ciudad, donde poca gente se atreve a aventurarse. Un lugar perfecto para entrenarte.

Kain: ¿Entrenarme? ¿Me has tomado por un perro

Umah: Tu memoria ha sido destruida y tu cuerpo ha yacido aletargado durante doscientos años. Debes recobrar tus habilidades para que puedas ser de alguna utilidad para la Cábala. Tienes que aprender a luchar y a sobrevivir.

Kain: Pensaba que me habías tomado para alimentarme.

Umah: Paciencia, vampiro. Primero, ten siempre en cuenta que eres más fuerte y rápido que los mortales. Capaz de saltar más alto y más lejos que ningún humano. Cuando tu camino esté bloqueado, busca un lugar para saltar. Ahora reúnete conmigo aquí.

Kain sube sin dificultades…

Umah: Excelente. Y tampoco olvides que tienes la habilidad de flotar. Cuando estés en una repisa como esta, puedes descender flotando silenciosa y cuidadosamente. Esto será importante cuando te entrene para matar. Ahora sígueme.

Kain (vo): Descubrirá que necesito poco entrenamiento para matar.

Umah (susurro): Te espero al final de esta calle, Kain. Si encuentras el camino bloqueado, usa cualquier objeto a tu alcance para continuar.

Kain entra en una habitación y vuelve a encontrase con Umah…

Kain: Esta ciudad es un laberinto.

Umah (susurro): El mejor terreno de caza. Dime, Kain, ¿estás hambriento?

Kain: Sí.

Umah: Tengo a un prisionero esperándote ahí abajo. Un matón de una banda local de criminales. Intentaba asesinar a otra víctima indefensa pero en su lugar se encontró conmigo.

Kain: Ahórrame la moraleja y llévame hasta su garganta.

Umah (susurro): Entonces bebe. Te esperaré abajo.

Kain absorbe la sangre del hombre encadenado…

Umah: Veo que te has recuperado.

Kain: Sí.

Umah: La sangre es tu vida. Sin ella morirás. Si estás herido, busca sangre para restablecer tu vitalidad.

También debes saber que bebiendo la sangre de otros, gradualmente te volverás más fuerte y difícil de matar. Nosotros lo llamamos Conocimiento Vampírico. De cuantas más criaturas bebas su sangre, más Conocimiento obtendrás y mayor será tu salud.

No dejes a ningún enemigo con vida, Kain. Necesitarás su sangre y su Conocimiento para sobrevivir. Ahora continuemos.

Kain llega a los muelles de Meridian…

Umah: Aunque en muchos aspectos somos superiores a los humanos, también tenemos algunas debilidades que ellos no poseen. Aunque el agua da vida a los humanos, para los vampiros es mortal. Su roce quema nuestra piel y la inmersión en ella puede matarnos. Evítala a toda costa.

También debes saber que, repartidas por Meridian, hay reliquias de nuestros antepasados. Son inútiles para los humanos. Sólo los vampiros pueden acceder a ellas y usar su poder. Búscalos durante tu viaje.

Umah le muestra a Kain una barrera hecha con energía de Glifo…

Umah: Ya te he hablado de nuestros mortales enemigos, los Sárafan. Su cruzada es destruir a todos los vampiros y para ello, han desarrollado defensas especiales. Ahí puedes ver una puerta de protección.

Kain: ¿Qué función tiene exactamente?

Umah: Tan sólo con tocarla, arderás como el fuego. Los Sárafan han levantado estas protecciones por todo Meridian. No podemos seguir por este camino. Sígueme a las alcantarillas.

En las alcantarillas, Umah se dispone a poner a prueba las habilidades de Kain…

Umah: Tu capacidad para sobrevivir dependerá de tu habilidad para luchar. Ha llegado el momento de que aprendas a matar.

Primero debes aprender cómo enfrentarte a un enemigo y como defenderte.

Bien. Tu primera línea de defensa es tu agilidad. Puedes esquivar a un adversario utilizando tu velocidad sobrehumana. Practícalo ahora. También, puedes defenderte bloqueando los ataques. Ahora te golpearé. No te preocupes, no usaré mis garras. Bloquea mis ataques y pasaremos a la siguiente lección.

Umah ataca a Kain. Cuando éste consigue bloquear todos sus ataques, Umah prosigue…

Umah: Todos estamos armados con un arma natural: Nuestras garras. úsalas para matar a tus enemigos. Puedes practicar atacándome.

Ahora Kain golpea varias veces a Umah…

Umah: Si ves que un enemigo está agotado, aprovecha para apresarlo. Una vez apresado puedes arrojarlo a gran distancia. Pero si pones más energía a tus ataques, también podrás romper las defensas a tus adversarios.

Kain agarra a Umah por el cuello y la vapulea…

Umah: ¡Excelente! La lección ha terminado… de momento. Continúa a través del alcantarillado. Me reuniré contigo dentro de poco.

Umah desaparece y Kain prosigue através de las alcantarillas…

Umah: ¡Por fin has llegado!. Detrás de esta puerta, está tu primera prueba real. Una banda de criminales ha acampado más adelante y uno de ellos permanece de guardia ajeno al destino que le espera.

Debes matarlo, Kain. Tienes la habilidad para bloquear y esquivar sus ataques. Acaba con él usando tus garras. Cuando lo derribes, bebe su sangre para recuperarte de cualquier herida que hayas sufrido. Te estaré observando.

Tras vencer al bandido y beber su sangre, Kain continúa hasta llegar a un cementerio donde hay una neblina a ras de suelo…

Umah (susurro): Además de nuestra superioridad física, los vampiros también poseemos dotes oscuras. Son nuestras habilidades sobrenaturales. La Maldición evoluciona de forma diferente en cada uno de nosotros.

Kain, parte de tu antiguo poder se ha debilitado durante tu larga hibernación, pero todavía retienes una dote oscura única. Puedes usar la niebla en beneficio propio. Tienes la habilidad de transformarte en niebla y volverte prácticamente invisible. Puedes moverte silenciosamente para acabar con tu presa por la espalda.

Cuando te superen en número, busca niebla desde la cual matar a tus enemigos silenciosamente. Si te persiguen, puedes ocultarte en la niebla para escapar. Ahora usa esa dote para matar a aquellos que tienes ante ti en el cementerio. Te dejaré continuar cuando termines.

Tras eliminar a los humanos del cementerio, Kain sale de él y se vuelve a encontrar con Umah…

Al avanzar, Kain encuentra un interruptor que funciona con energía de Glifo…

Kain: ¿Qué clase de brujería es esta?

Umah: Eso es energía de Glifo, una nueva forma de magia que apareció con el surgimiento de los Sárafan. Suministra energía a todo Meridian. La puerta que ves, se puede abrir usando esa energía. Activa el cajetín del glifo. Eso proporcionará energía a la palanca de la puerta y te permitirá abrirla.

Kain: Ya veo.

Kain activa el cajetín y abre la puerta…

Umah: ¡Bien hecho! Los glifos son controlados por los Espectros del Glifo. Una sociedad secreta de Meridian. Puedes verlos trabajando en los glifos de vez en cuando. Rara vez hablan con la gente y se sabe muy poco sobre sus orígenes.

Más adelante está el mercado donde la escoria de Meridian se entretiene con su sucio comercio. Más allá del mercado, está el puente que lleva a la Ciudad Inferior. Dirígete hacia el este, hasta el puente. Me reuniré contigo allí.

Kain: ¿Adónde te diriges?

Umah: Me adelantaré para asegurarme de que no te encuentras con patrullas Sárafan. Todavía no estás preparado.

Kain: Que gran confianza en mí. Abandonarme para que me las arregle yo solito.

Umah: Considéralo un acto de buena voluntad.

Kain se abre paso hasta el puente…

Umah: Ven, por aquí. Sígueme.

Kain: ¿Dónde vamos?

Umah: Te llevo al Santuario, el corazón de La Cábala. Es hora de que conozcas a nuestro lider.

Kain (vo): Había llegado el momento de conocer los planes del que se hacía llamar lider y conocer cuales eran los planes que tenía para mí. Umah me había adelantado algunas cosas.

Umah: Kain, por aquí.

Un centinela Sárafan se percata de la presencia de Umah y da la alarma. Kain queda separado de esta por una barrera de Glifo…

Soldado: ¡Vampiro! ¡Aquí! ¡Cerrad la puerta!

Umah: Kain, debes encontrar el modo de llegar hasta la Ciudad Inferior. El Túnel del Contrabandista te llevará hasta allí.

Soldado: ¡Vampiro pestilente, muere!

Umah: Ve al Gran Hotel, en los barrios bajos. Allí te espera un contacto. Él te dirá dónde tienes que ir.

Soldado: ¡Apestoso y piojoso demonio chupasangre!

Umah: ¡Deprisa Kain! ¿Quieres morir ahora? Ven aquí y acabemos con esto.

Soldado: ¡Vuelve!

Umah hace que el soldado la siga a lo largo del puente…

Kain (vo): Estaba solo. En una ciudad que había cambiado demasiado. En un país bajo el influjo de una maldición. ¿Debería seguirla como me pidió? ¿O debería seguir mi camino y encontrar respuestas? Pero las respuestas me esperaban en el Santuario. Después de eso, sabría lo que tenía que hacer.

Kain llega al Gran Hotel y se encuentra con el contacto del que Umah le habló…

Kain: Me dijeron que me reuniera aquí con alguien.

Humano: ¿Quién anda ahí? Tú debes de ser Kain.

Kain: Y tú eres humano. Resulta curioso que ayudes a alguien como yo.

Humano: Los humanos odiamos a los Sárafan. Las cosas que hacen no están bien. No son normales. Si tu raza puede derrotarlos, yo te ayudaré.

Kain: Debo encontrar la guarida del contrabandista.

Humano: La entrada está más cerca de lo que te imaginas. Por ahí llegarás a la Guarida del Contrabandista. Pero ten cuidado. Hay granujas que te atacarán en cuanto te vean.

Kain: En ese caso, morirán.

Humano: Espera. Dile a Umah que te he ayudado. Por favor, me prometió la Dote Oscura si hacía lo que me pedía. Se lo dirás ¿Verdad?

Kain: Estoy seguro de que Umah te dará todo lo que te mereces.

Durante la conversación de Kain con el humano, una misteriosa figura aparece y se oculta tras Kain. Cuando éste avanza por el túnel, el oculto personaje degüella al humano.