Blood Omen 2

La fortaleza Sárafan

Vorador (susurro): Bien hecho, Kain. Al fin has entrado en la fortaleza Sárafan.

Kain: No sin dificultades. He encontrado a otro viejo amigo por el camino: Marcus.

Vorador (susurro): Ya veo. ¿Entonces debo suponer que otro de los guardianes de Lord Sárafan ha caido?

Kain: Sí.

Vorador (susurro): En varias ocasiones intenté persuadir a Marcus de que se uniera a nosotros pero no me hizo caso.

Kain: Mis argumentos fueron más convincentes.

Vorador (susurro): Presiento que Umah está retenida en la parte más alta de la fortaleza. Debes darte prisa, pronto será ejecutada.

Kain: ¿Dónde está Lord Sárafan? ¿Está aquí?

Vorador (susurro): No lo sé. Su presencia está oculta a mis sentidos. Pero no te enfrentes con él todavía, Kain. Si le encuentras, ocúltate. Si te ve, ¡corre!

Kain: ¿Correr? ¿Ocultarme? Vorador, no me conoces.

Vorador (susurro): Tu tarea es encontrar a Umah rápidamente. No dejes que nada te distraiga. La información que ha obtenido del barrio industrial puede permitirnos derrotar a Lord Sárafan por fin. No destruyas nuestra única oportunidad con una acción imprudente.

Kain (vo): Qué débil hubiera sido si hubiera hecho caso de advertencias, de precaución y cuidado. Cuánto tiempo ansié desgarrar la carne de mi enemigo acérrimo. Qué ansia tenía de saborear su sangre en mis labios.

Vorador (susurro): Vamos, Kain. ¡Rápido! Te estaré observando.

Kain consigue acceder a la fortaleza. Allí encuentra a una mujer que custodia el interruptor que abre una puerta de protección. Ésta le dice que sólo abrirá esta puerta si Kain mata a un noble que se halla visitando la fortaleza…

Mujer: Saludos, vampiro.

Kain: Me ha confundido, señora, por una cosa que no soy.

Mujer: No me hagas perder el tiempo. Sé lo que eres. Trabajo para la Cábala. Ahora escúchame atentamente.

Kain: En ese caso hable, señora.

Mujer: La mujer que buscas está prisionera en una de las torres superiores.

Kain: Muy bien. ¿Cómo puedo llegar hasta ella?

Mujer: No tan rápido. Antes tendrás que pasar esta puerta de protección. Y me necesitarás a mí para que te la abra.

Kain: Entonces hagámoslo ahora mismo.

Mujer: Todo en su momento. Antes hay otra tarea que debe llevarse a cabo.

Kain: ¿Qué tarea?

Mujer: Un noble de reconocido prestigio está visitando la foraleza en este momento. ¡Debe morir!

Kain: ¿Para que puedas abrir la puerta de protección? ¿Acaso crees que soy un estúpido? ¡Ábrela!

Mujer: Te estoy diciendo que ha de morir. Él es un traidor. Ha causado un daño incalculable a la Cábala, te lo juro.

Kain: ¿Acaso te parezco un vulgar asesino?

Mujer: La puerta de protección no se abrirá hasta que ese hombre esté muerto, te lo prometo. Su nombre es Artemis. Lo reconocerás por su capa azul. Cuando haya muerto y su lengua mentirosa calle para siempre, abriré la puerta, pero no antes. ¿Lo harás?

Kain: Según parece no tengo otra alternativa.

Mujer: ¡Vete! ¡Mátalo, Kain! ¡Arráncale su cruel corazón! Vuelve cuando hayas acabado.

Kain consigue llegar a la parte más alta de la fortaleza donde tres soldados custodian la celda donde se encuentra Umah…

Soldado 1: Los cuerpos se encontraron abajo. El intruso está cerca. Quiero que patrulles por el patio.

Soldado 2: Sí, señor.

Soldado 3: Yo vigilaré la celda.

Tras matarlos, Kain encuentra encadenada a Umah…

Umah: Kain. Pensaba que nadie se atrevería a rescatarme. Eres un valiente… o un estúpido.

Kain: Descubrirás que soy implacable.

Umah: Debe de haber cerca un glifo que proporciona energía a la protección. Encuéntralo y apágalo.

Kain: ¿Qué es lo que has descubierto en el barrio industrial? Dímelo por si no puedo liberarte.

Umah: ¿Decírtelo ahora? ¿Antes de que me liberes? ¿Qué harías en mi lugar, Kain?

Kain: Daría un voto de confianza a mi rescatador.

Umah: Esa información es sólo para Vorador.

Kain: ¿Todavía no me he ganado tu confianza?

Umah: Todavía no me has rescatado.

Kain: Muy bien. Volveré enseguida.

Kain consigue liberar a Umah…

Kain: Estás herida.

Umah: No es nada. Debemos llegar al tejado. Cuando estemos fuera de estas murallas hechizadas podré usar un conjuro para volver al santuario.

Saliendo al patio exterior, Lord Sárafan hace acto de presencia…

Umah: ¡No!

Kain: ¡Al fin!

Lord Sárafan: ¿Qué alma viva perturba mi orden? ¿Qué criatura osa derramar la sangre de mis sirvientes?

Kain (vo): Tenía la espada. ¡La Segadora de Almas! El premio que yo gané hace tanto tiempo estaba en sus sucias manos.

Lord Sárafan: ¿Qué es esto?

Kain: Me conoces.

Lord Sárafan: ¡No! ¡Fuiste completamente destruido! ¡Así de fácil! Tu nombre fue arrastrado por las aguas del pasado. Todos tus planes fueron quemados y se convirtieron en humo y cenizas.

Kain: Deja que esas palabras sean tu epitafio.

Lord Sárafan: ¿Te atreves a soñar con matarme? Esa fantasía se ahogó en sangre hace mucho tiempo cuando te derroté y todavía no lo has comprendido. Qué criatura tan patética. ¿Te atreves a desafiarme de nuevo?

Kain: ¡Muere, demonio!

Kain ataca a Lord Sárafan pero éste repele su ataque…

Umah: ¡No, Kain!

Lord Sárafan: Es el destino que mueras a mis manos. ¿Cuántas veces he de enseñarte esa lección?

Umah: Es demasiado fuerte para ti. Kain, con la Segadora de Almas puede matarnos a ambos. Debemos huir y enfrentarnos a él cuando seamos más fuertes.

Kain: ¡No, suéltame! ¡Esa porquería de demonio es mío!

Lord Sárafan: Soy tu destino, Kain. Ahora y siempre. No importa cuánto lo retrases. Vendrás a mí.

Umah invoca el conjuro que los transporta al santuario de la Cábala y se lleva a Kain con ella…

Vorador: ¡Umah! ¡Sana y salva! Kain, tienes todo nuestro agradecimiento.

Kain: Puedo seguir órdenes cuando me conviene. Nos encontramos con Lord Sárafan.

Vorador: ¿Se mostró en persona?

Kain: Es un poco más poderoso de lo que esperaba y tiene la Segadora de Almas. Me extraña que no me lo dijeras antes.

Vorador: No estás preparado para luchar con Lord Sárafan, ya te lo dije.

Umah: Escapamos por los pelos. Vorador, tengo que hablar contigo.

Vorador: Tienes información para nosotros, lo sé. Puedes hablar.

Umah: Estaba en el corazón de la fábrica principal en el barrio industrial. Antes de que los guardias me descubrieran encontré una enorme cámara central y en la que había algún tipo de portal mágico.

Ese portal parecía llevar a un lugar del que nunca he visto nada parecido y ese portal se mantenía abierto por una única fuente de magia, una piedra sobre un pedestal. Vorador, creo que es la Piedra Nexo.

Vorador: ¿La Piedra Nexo? ¡Por supuesto!

Kain: ¿Qué es esa cosa? Explícate.

Vorador: La Piedra Nexo es un objeto de gran poder. Puede doblar el tiempo y el espacio para crear portales a cualquier lugar de Nosgoth. No sé por qué Lord Sárafan la está usando en el barrio industrial, pero podría sernos muy útil.

Kain: ¿Y qué utilidad es esa?

Vorador: El portador de la Piedra no puede ser dañado por la Segadora de Almas.

Kain: ¿Y si es una leyenda que demuestra ser falsa en el peor momento?

Kain: Oh, no. No es una leyenda. Ha sido demostrado. Lord Sárafan llevaba la Piedra cuando te derrotó hace doscientos años.

Kain: ¿Qué?

Umah: ¿Cómo podría haber resistido sino el poder de la Segadora de Almas? Fuiste incapaz de usar el poder de la espada y sin éste, él fue capaz de derrotarte.

Kain: Entonces conseguiré la Piedra y la usaré para matarle. Pero escucha esto: cuando la recupere también reclamaré su propiedad. Confío en que eso se sobreentienda.

Vorador: ¿Entonces te comprometes a enfrentarte a Lord Sárafan? No puede haber vuelta atrás.

Kain: Me comprometí a ello en el momento en el que me devolviste la vida. Nada hará que me vuelva atrás.

Vorador: Así sea. Debes usar el paso subterraneo para llegar al barrio industrial que se encuentra en la parte nordeste de la ciudad. Encuentra la forma de cruzar la puerta que evita que entre la gente de la ciudad, pero quizá sea mejor dejar eso a tu inventiva. ¡Umah!

Umah: Una vez en el barrio, busca el edificio principal de la fábrica. Ahí es donde está la Piedra.

Kain: Volveré con la Piedra Nexo y la cabeza de Lord Sárafan.